Muchas personas en Santo Domingo se han sorprendido de escuchar
a Miguel Horacio cantar al Señor, pues le conocían como predicador o como
profesor de la Escuela de Evangelización Juan Pablo II de la República
Dominicana. Aunque él tiene mucho tiempo cantando la mayoría de sus canciones,
principalmente en momentos de oración personal. Miguel Horacio pertenece a la
comunidad Siervos de Cristo Vivo, una comunidad de laicos fundada por el Padre
Emiliano Tardif M.S.C. , María Sangiovanni y Evaristo Guzmán, la comunidad
tiene tres "vocaciones" o tres carismas principales: La
Evangelización en el poder del Espíritu Santo, La adoración al Santísimo
Sacramento y la transformación en Cristo. "Sólo en la presencia de Dios
podemos ser transformados" dice Miguel Horacio "Vemos en el Evangelio
como las personas eran transformadas en la presencia de Jesús. Hoy El sigue
haciendo lo mismo. De esto soy testigo".
Miguel Horacio apoyado por su
comunidad está dedicado a tiempo completo para servir en la Nueva
Evangelización. Aún no ha hecho ningún estudio musical, ni de canto. (No porque
esté en contra de ello sino por falta de tiempo, esto puede cambiar) y es que
él no se considera a si mismo un "cantante profesional", se considera
testigo del Amor y la Misericordia de Dios. Sus canciones quieren proyectar que
es posible la intimidad con Dios. Dice: "Creo que Dios está creando no sé
si llamarle un nuevo estilo de música a la que podríamos nombrar
"adoración evangelizadora". No es una lucha entre adoración y
evangelización. No es cuestión de cual ocupa el primer lugar, si la adoración o
la evangelización. Lo importante es que Jesús sea "levantado". Es que
si adoramos con todas las fuerzas de nuestro corazón al Señor, los corazones de
los que están al rededor pueden notar su necesidad de Dios y abrirse.
"
Ultimamente Miguel Horacio está
dedicando más tiempo a la "adoración evangelizadora" a través de
conciertos de oración. También es autor del libro “Proyecto O.P.D. (Oración
Personal Diaria),” una publicación práctica que ayuda a las personas a vencer
obstáculos y tener un tiempo diario y fructífero en oración.
"Muchos no saben adorar
a Jesús. Nuestro deseo es que los que nos vean, nos escuchen, sientan nuestras
canciones y se unan a nuestra adoración a Dios. Que puedan ser contagiados del
mismo Espíritu que nos anima y que en lo profundo de su interior se les
despierte la sed de beber del Agua que estamos bebiendo."