Feliz la que ha creído (3:04)


Mi alma canta al Señor
la grandeza de su amor
y mi espíritu se alegra
en Dios mi Salvador.
Se fijó en mi pequeñez
el creador del infinito,
todos me dirán ahora
feliz porque has creído.

En Dios pongo mi esperanza
porque grandes cosas ha hecho en mí,
al Dios fiel vaya mi lode,
que a su pueblo ha liberado
y jamás se ha olvidado
de sus promesas de amor.

Dispersó a los soberbios
en sus propios corazones;
derribó a los poderosos
exaltando a los humildes;
y sació a los hambrientos,
abriendo al rico sus manos.